La Cámara de Diputados aprobó ayer tres dictámenes de reforma a la Constitución para eliminar la discriminación laboral; garantizar una vivienda adecuada, y evitar que apoyos económicos sean susceptibles de retenciones o embargos.
En el primer caso se reformó el Artículo 123 constitucional para que para que todo contrato de trabajo se incorpore que “tampoco podrá establecerse un límite máximo de edad para la contratación u ocupación de un empleo”.
Además, para el sector público se incluyó que en ningún caso podrá establecerse una restricción de edad máxima para el acceso o continuación en un cargo dentro del este sector.
El dictamen indica que hay evidencia de que la participación de la población adulta mayor tiene impactos positivos en la sociedad a nivel general, ya que aporta experiencia, productividad y vitalidad.
En cuanto al “blindaje” a los apoyos económicos de programas sociales ante retenciones o embargos por particulares, el pleno votó por unanimidad los cambios.
Con ello, los apoyos económicos, pensiones no contributivas, becas y demás apoyos que tengan por objeto el combate a la pobreza y la desigualdad social que entreguen los gobiernos federal, estatal o municipal no serán susceptibles de retenciones, descuentos, deducciones, compensaciones o embargos por parte de particulares.
Finalmente, respecto a la vivienda adecuada, los legisladores en San Lázaro modificaron el Artículo 4 de la Carta Magna para establecer que toda persona tiene derecho a ella.
El dictamen refiere que el derecho a disfrutar de una vivienda digna y decorosa fue incluido en la Carta Magna en 1983, pero esta definición no conlleva una conciencia de responsabilidad ambiental, lo que la aleja de un desarrollo sustentable generador y regulador de recursos naturales.
Los tres dictámenes fueron enviados al Senado para su revisión y votación, por tratarse de reformas constitucionales, de aprobarlas la Cámara alta se enviarán a los 32 congresos estatales para su aprobación, de los cuales únicamente necesita el aval de 17.