El debate se centró en dos puntos opuestos, pues mientras los que están a favor argumentan que el matrimonio igualitario es un derecho humano que no debe ni siquiera someterse a debate o sondeo alguno, para los que están en contra, el argumento es el dogma divino de que “Dios creó hombre y mujer”.
“Por favor eviten deteriorar más a la sociedad al permitir el matrimonio igualitario, no lo considero un buen ejemplo para los niños, les causará más problemas y confusión con el tiempo. Dios creó hombre y mujer para unirse en matrimonio, la unión entre personas del mismo sexo va en contra de las leyes de la naturaleza y de Dios”, cita un comentario registrado a las 11 horas con 41 minutos y 43 segundos.
Prácticamente al mismo tiempo, otro ciudadano dejó el siguiente mensaje: “Los derechos no se ponen a consulta, es inaceptable coartar los mismos a cualquier minoría. SÍ al matrimonio igualitario. NO a los prejuicios religiosos en un Estado laico”.
También hubo quien trató de justificar su negativa a las bodas igualitarias: “No estoy de acuerdo con esta reforma de matrimonio ya que considero que atenta contra los valores y principios morales del modelo familiar, no soy religioso pero no me parece correcto considerar la unión de dos personas del mismo sexo como matrimonio, que es algo instituido por la iglesia, no tengo ningún tipo de homofobia, respeto a las personas pero esto no está dentro de los márgenes establecidos para formar una familia, que es un padre una madre y los hijos, solo porque se pueda pagar por ello [sic]”.
Dictamen se debate hoy en comisiones
Este martes, en sesión de la Comisión de Puntos Constitucionales y Gobernación, se pondrá a discusión y en su caso se aprobarán las modificaciones a la Constitución estatal que permitirían que personas del mismo sexo puedan contraer matrimonio entre sí, reveló la diputada priísta Karla Franco Blanco, presidente de ese organismo.
En entrevista, la legisladora señaló que luego de conocer y entregar los más de 14 mil 116 registros a los diputados que conforman esa Comisión, durante la sesión de trabajo celebrada este lunes se acordó enviar la información al resto de los legisladores.
“Se les hizo entrega a los diputados que asistieron a esa reunión de trabajo un disco que contiene la información de lo que se registró en este micrositio a través de la Comisión de Puntos Constitucionales. Haremos los propio con los demás diputados para que conozcan los diputados esos comentarios que se recibieron”, dijo.
Franco Blanco advirtió que no le darán más vueltas al asunto, por lo que el dictamen sería votado este martes.
“Acabo de firmar la convocatoria. Mañana, a la una treinta de la tarde, se convoca a análisis, discusión y en su caso dictaminación de la iniciativa relacionada con el matrimonio igualitario”, reveló.
Finalmente, consideró que en caso de existir las condiciones necesarias, si así lo decide el presidente de la Mesa Directiva, Enrique Castillo Ruz, el dictamen sería puesto a consideración en el Pleno que se llevará a cabo este miércoles, en punto de las 11 horas.
Activistas se movilizan
Durante la mañana de ayer, activistas realizaron diferentes acciones en pro del matrimonio igualitario. La primera de ellas fue protagonizadas por Nancy Walker Olvera y Ligia Vera Gamboa, quienes entregaron una carpeta con más de 22 mil firmas de apoyo para emplazar a los legisladores a que aprueben que dos personas del mismo sexo puedan contraer nupcias civiles.
Asimismo, Carlos Escoffié Duarte, promotor de los derechos humanos, distribuyó un documento en el cual, además de condenar la instalación del micrositio para consulta sobre el matrimonio igualitario, acusa a los diputados locales de simuladores y de victimizarse.
“La simulación de apertura a recibir opiniones y comentarios y la victimización son estrategias del Congreso de Yucatán para buscar evadir su responsabilidad por no aprobar el acceso de las parejas del mismo sexo al matrimonio”, expuso.
Finalmente, argumenta el comunicado que los legisladores y grupos antiderechos quieren hacer pasar su discriminación y homofobia como asuntos de mayorías, victimizándose, con falsas amenazas, mentiras y omisiones sobre derechos y reivindicaciones de libertad y soberanía para incumplir acuerdos internacionales progresistas; es decir, para rechazar aquellos acuerdos que buscan que las personas no reciban nunca más mensajes de odio sólo por su orientación sexual.
