El uso de nuevo etiquetado de productos con alto contenido calórico crece en los aparadores y anaqueles de supermercados y tiendas, ya que el 30 de noviembre será la fecha límite para que las empresas cumplan con la nueva normatividad sanitaria NOM051.
Chocolates, dulces, pastas, sopas, productos de harina, derivados y procesados, jugos y refrescos embotellados, galletas, embutidos, deberán llevarlo para advertir a los consumidores sobre las grasas trans, edulcorantes y conservadores que fueron utilizados en su elaboración.
En opinión de Juan Martín Pérez, especialista en aspectos de la niñez, este nuevo etiquetado no resolverá el problema de obesidad, diabetes y mala alimentación de la infancia mexicana, ya que, en muchos de los casos, la situación económica de las familias no les permite modificar sustantivamente la adquisición de mejores productos disponibles al público.
Explicó que esta política pública es importante y podrá ayudar a resolver la mala alimentación de millones de niños mexicanos, pero será a largo plazo y no de manera inmediata.
Hizo notar que muchos de los productos con la nueva etiqueta son los que se entregan en despensas y apoyos alimentarios, lo que resulta contradictorio.
Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra-Yucatán), Alberto Abraham Xacur, ha señalado que por un lado habrá una regulación para los productos que se venden en mostradores y anaqueles de empresas establecidas, pero existen muchos que se elaboran de manera artesanal y se venden de manera informal, que no llevarán este nuevo etiquetado.
El sector regulado se adapta y las empresas yucatecas ya incluyen la nueva disposición principalmente empresas de salsas, frituras, alimentos elaborados y envasados con alimentos tradicionales, pero no se ha previsto lo que implicará para conservas y enlatados que se fabrican y procesan en pequeñas plantas que no están debidamente registradas.
ACOM
