El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió el proceso de recuperación de Petróleos Mexicanos que se ha expresado con una recuperación en la producción petrolera después de un desplome registrado durante la pasada administración. Asimismo, destacó que por primera vez en 10 años la empresa no ha contratado deuda.
Durante la conferencia matutina, López Obrador fustigó a las calificadoras que no consideran este proceso de rescate de Pemex que ha emprendido este gobierno y, por el contrario, ahora se le responsabiliza de la deuda contraída durante el neoliberalismo. Subrayó que mientras en la pasada administración las calificadoras internacionales no cuestionaban la estrategia seguida con Pemex ahora sí destacan que Pemex es la empresa petrolera más endeudada del mundo.
Informó que en enero de 2018 la producción petrolera era de un millón 926 mil barriles diarios que, en el plazo de un año, a enero de 2019 se redujo en 300 mil barriles para ubicarse en un millón 625 mil barriles. Sin embargo refirió que en este año se ha detenido la caída libre de la producción y ha comenzado una ligera recuperación con la producción ya de un millón 700 mil barriles diarios y estimándose que en tres años se podrán producir 2.5. millones de barriles diarios.
Condenó a los tecnócrata de corruptos que ahora son los que descalifican a Pemex por las complicaciones que enfrenta cuando en el pasado no juzgaban esa condición. Si fueran calificadoras serias deberían de ponderar los esfuerzos que se realiza en este gobierno, la asignación de 50 mil millones de pesos para la construcción de la refinería de Dos Bocas, Tabasco, para recuperar la empresa. Como parte del «gran futuro» que tendrá cuando se recupere.
