Santos empezó las gestiones para convencer al América de que dejen salir a Oribe Peralta, buscando así el regreso de una de las máximas figuras de su historia para que termine su carrera como profesional en el equipo donde consiguió dos campeonatos de Liga MX.
En el presente torneo, el Cepillo solo tuvo 242 minutos y es que una lesión en el tobillo derecho lo alejó de la mayor parte de la temporada, razón por la que la dirigencia azulcrema podría meditar ceder ante las peticiones de los laguneros.
Otra de las razones por las que el América vería con buenos ojos un intercambio con Santos es que en la negociación podría entrar Julio Furch, delantero argentino que fue campeón de goleo en el Apertura 2018 y así generar una competencia interna.
Cabe recordar que estos dos equipos tienen una buena relación, incluso han intercambiado jugadores en los últimos torneos, como Oribe, Christian Benítez, Matías Vuoso, Jorge Sánchez, Jesús Molina, Agustín Marchesín, entre otros.
El “Cepillo” no olvida la Partida, el lugar donde nació, su barrio y por mucho que tenga respeto por los colores del conjunto de Coapa, siempre le acaba ganando el corazón.
Hace unos años, en una entrevista para una televisora se le salió decir que el Santos era el equipo de sus amores, y aunque después salió a desmentir y decir que lo habían malinterpretado, lo cierto es que no puede ocultar su debilidad por este equipo, y para nada se trata de volver a quemarlo ni mucho menos, es su tierra y era de esperarse que siempre tuvieran una predilección especial por estos colores.
A sus 35 años, Oribe sabe que cuenta con los dedos de la mano los meses que le quedan como profesional y está esperando que en Grupo Orlegi le den el visto bueno, aunque sabe perfecto que ya no está para jugar 90 minutos.
No pide más, ni un partido especial ni una playera conmemorativa ni que le mantengan un sueldo como si fuera una de las estrellas del equipo, solo decir adiós en el conjunto de su tierra natal.
