El fiscal general de Brasil, Augusto Aras, abrió una investigación sobre el presidente, Jair Bolsonaro, y el ministro de Salud, Eduardo Pazuello, por presunta negligencia en su manejo de la pandemia de COVID-19.
Centra la pesquisa en la respuesta del mandatario a un brote de covid-19 en la ciudad de Manaos y la administración de los fondos federales destinados al sector salud.
Ubicada en lo profundo de la selva amazónica, Manaos ha sido duramente golpeada por una segunda ola de la pandemia que ha desbordado sus servicios de emergencia.
La ciudad se quedó sin oxígeno en enero, lo que llevó al gobierno federal a mandar tanques de todo el país en un intento de salvar a la gente de morir asfixiada.
La zona, además, es el lugar de origen de una variante del coronavirus, con mutaciones similares a las de Gran Bretaña y Sudáfrica que, según los investigadores, es más transmisible y podría estar empeorando la situación en la ciudad.
La investigación sobre Bolsonaro y Pazuello, revelada por Aras en un documento enviado al juez del Supremo Tribunal Federal, Ricardo Lewandowski, y al que Reuters tuvo acceso sigue las solicitudes de ocho congresistas federales del Partido Comunista para llevar a juicio al mandatario por el colapso hospitalario y la falta de oxígeno.
En el documento, Aras dijo que había comenzado una “investigación preliminar”. Esto puede preceder a una indagatoria más formal conocida en Brasil como inquérito, una investigación que requeriría la aprobación del tribunal.
“Si, finalmente, salen a la luz indicios razonables de posibles irregularidades (…) se presentará una solicitud para el inicio de un inquérito al STF”, se lee en el documento.
La semana pasada, Lewandowski autorizó la apertura de un inquérito sobre la conducta de Pazuello en relación con Manaos, pero esa investigación no involucra a Bolsonaro.
La oficina del procurador general de Brasil, que es responsable de defender a Bolsonaro, y el Ministerio de Salud no se han pronunciado.
En su argumento, Aras aseveró que: “El 14 de enero, ocho días después de que Pazuello se enterara del inminente colapso del sistema de salud en Manaos, el Ministerio de Salud entregó 120 mil unidades de hidroxicloroquina para tratar covid-19, a pesar de que este medicamento no tiene una eficacia científicamente probada para combatir la enfermedad”, recogió la brasileña Revista Fórum.
El país sudamericano, el segundo más afectado por el virus, sumó ayer 56,873 casos, que elevan a 9,396,293 los positivos acumulados desde el inició de la pandemia.
Ayer murieron en ese país mil 232 personas, con lo que el total de decesos asciende a 228 mil 795, según datos del Ministerio de Sanidad.
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